La primavera es sinónimo de renacimiento, alegría, flores y naturaleza viva. Los días se alargan, el sol está presente en muchos de ellos y, poco a poco, vamos dejando el frío invernal para recibir el calor que los rayos de sol nos van entregando a medida que pasan los días. Y, sin embargo, a ciertas personas, el cambio de estación no les sienta nada bien: se sienten cansados, hacer las tareas diarias les supone un suplicio y, como consecuencia, están deprimidos e irritables.
Todos ellos son síntomas de la famosa «astenia primaveral» que, tal y como los expertos aseguran, afecta al 10% de la población y muchos no saben que la padecen y que tiene fácil solución. Es por ello que, en este blog y siempre desde la humildad y mediante información de fuentes contrastadas, explicaremos qué es exactamente este trastorno, sus síntomas y cómo combatirlo de forma natural, a base de buenos hábitos y el consumo de alimentos y plantas como el té o las infusiones. ¡Comenzamos!
¿Qué es la astenia primaveral?
Cansancio, agotamiento y decaimiento, en general. Estos son los síntomas principales de este trastorno que, como decíamos, afecta al 10% de la población. Uno de los principales problemas a la hora de diagnosticar este tipo de trastorno es que la comunidad científica no se pone de acuerdo es si se trata de una enfermedad que necesita de medicación específica o si se ha de tratarse, únicamente, con soluciones naturales, como puede ser la ingesta de complementos alimenticios a base de vitaminas y minerales, componentes que podemos encontrar en tés e infusiones naturales que, además de tomarse muy fácilmente y de manera muy cómoda, son deliciosos.
La astenia primaveral está causada, tal y como explica Almudena Reguero, periodista especializada en temas de salud, «por una disminución de betaendorfinas en el plasma, sustancias que regulan el sistema bienestar malestar, que al alterarse producen una sensación de decaimiento y agotamiento».
La astenia puede ser física, que se traduce, tal y como su nombre indica, en cansancio físico y, también puede ser psicológica, es decir, que uno se siente agotado mentalmente y no es capaz de llevar a cabo las tareas diarias.
Pero, ¿cuáles son las causas de este trastorno? Entre otras, los expertos coinciden en las siguientes:
- El cambio de hora, que hace que disminuyan las endorfinas, que son las hormonas del bienestar
- Los cambios de luz y presión atmosférica: el aumento de horas de luz aumenta la producción de melatonina, la hormona que regula el sueño.
Los síntomas más comunes de las personas que sufren astenia primaveral son: cansancio, falta de sueño, somnolencia diurna, dolor de cabeza, malestar general, tristeza, irritabilidad, pérdida de apetito, de deseo sexual, cierta pérdida de memoria, debilidad muscular y tensión arterial baja.
Síntomas que, por lo general, suelen durar entre una y dos semanas, es decir, el tiempo que tarda el cuerpo de la persona afectada en adaptarse a los cambios que causan dichos síntomas, por lo que los expertos coinciden en señalar que no se trata tanto una patología, sino de un trastorno adaptativo.
¿Cómo afrontar la astenia primaveral de forma natural?
Puede que las personas que padecen este tipo de trastorno no vean claramente «la luz al final del túnel», pero es relativamente sencillo volver a recuperar el ánimo y estado físico habitual y de forma natural. Para eso, desde Aromas de Té, te recomendamos llevar a cabo las siguientes pautas:
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Descansar: todo el tiempo que puedas y que sea necesario. Si necesitas dormir más o estar más tiempo tranquilo en el sofá, hazlo. De esta manera, recuperarás las fuerzas y evitarás la bajada de defensas. Cabe señalar que el sueño debe ser reparador, por lo que es importante evitar realizar acciones como, por ejemplo, hacer deporte poco antes de dormir, consumir bebidas excitantes o afrontar situaciones que nos pongan nerviosos.
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Horarios fijos: la mejor manera de que el cuerpo se adapte lo antes posible a los cambios es que se siga una rutina con horarios fijos.
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Hacer ejercicios de relajación o ejercicio físico moderado: como el yoga o caminar. En definitiva, hacer cosas que te relajen y que no te supongan esfuerzos excesivos, de manera que no te dé pereza llevarlos a cabo.
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Hacer actividades que nos agraden: de manera que nos sintamos cómodos y bien con nosotros mismos y nos alegremos.
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Alimentación: sana y equilibrada y en la que incluyas alimentos que te aporten energía como puedan ser, por ejemplo, los frutos secos, plátanos (estos últimos, ricos en triptófanos, la hormona de la felicidad), legumbres, pasta o chocolate, entre otros. En este sentido, es esencial hacer cinco comidas al día, que sean sanas y equilibradas.
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Hidratación: es importante estar bien hidratado, por esta razón, los expertos recomiendan beber dos litros de agua al día. La falta de hidratación es la causante de la aparición de cefaleas, entre otras dolencias.
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Complementos dietéticos: que deberías incluir en tu dieta, a modo de apoyo. Entre otros, la jalea real, el polen o la levadura de cerveza, son los que habitualmente se recomiendan en todos los centros de salud natural y herbolarios, sin olvidar los oligoelementos, como pueden ser e hierro o el manganeso, que nos ayudarán a combatir el cansancio.
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No automedicarse: si consideramos que necesitamos medicación, lo mejor será acudir al especialista o a nuestro médico de cabecera. En todo caso, si una persona está bien alimentada y hace ejercicio moderado o de relajación de forma regular, sólo con ayudarnos con plantas medicinales que nos den un aporte extra de vitaminas y minerales será más que suficiente para superar esta astenia en el periodo más breve posible.
Tés, infusiones y plantas contra la astenia
Además de llevar a cabo las pautas mencionadas, como no podía ser de otro modo, también hay, como decíamos, plantas, tipos de tés e infusiones que nos pueden ayudar a recuperar nuestro estado de ánimo físico y mental habitual.
En cuanto a las plantas, las dos más fáciles de encontrar y que tienen efectos muy positivos, además de ser muy recomendables por todo lo que, en general, aportan para nuestra salud, en cualquier momento del año, son: el
Además, el té verde, debido a su anto contenido en antioxidantes y la espirulina, rica en proteínas y nutrientes, así como un alto contenido en minerales como el calcio, el hierro, el sodio y el potasio son ideales para esta época del año.ginseng y el jengibre.
El ginseng te ayudará a aumentar tu vitalidad, la actividad mental, así como a mejorar tu estado físico. Por su parte, el jengibre es muy estimulante y te ayudará a recuperar tu vitalidad, aportándote un completo estado de bienestar.
En este sentido, en Aromas de Té disponemos de una amplia selección de tés e infusiones que contienen los productos antes mencionados.
Para comenzar, como bien sabéis, disponemos de una sección exclusiva de té verde, en la que destaca, por otro lado, la sección de té matcha, fácil de digerir, mucho más potente que el té verde y que, además, se puede utilizar también para elaborar recetas. Ahora, además, disponemos de té matcha con de sabores.
Las algas, como mencionábamos, son ricas en vitaminas y minerales, por lo que te podemos recomendar nuestro té verde con algas para salir adelante de este trastorno, pero también para seguir tomándolo el resto del año.
Otra delicia relacionada con el té verde y el ginseng es el té verde ginseng pasión que podrás encontrar pinchando aquí.
En caso de que desees tés o infusiones que contengan jengibre, deberás pinchar en este enlace. Entre los mismos cabe mencionar el té chai negro, que puedes infusionar con agua o leche y que te ayudará a estar en forma desde primera hora de la mañana, tanto a nivel físico, como mental; la infusión Carpe Diem que, además de ser apta para todos los miembros de la familia, es una auténtica fuente de vitaminas y minerales; o el té rojo Sabores de Oriente, que te ayudará a despertar tus sentidos y cuyo aroma te embriagará.
Existe una tercera opción, si no te gustara ni el ginseng ni el jengibre, de tomar otros tipos de té verde, té negro o té rojo. Todos ellos, muy indicados para mejorar nuestro estado físico y mental, por lo que es conveniente tomar de dos a tres tazas al día, cuando nos encontremos ante un caso de astenia primaveral. Todos estos tés nos aportan la vitalidad que esos días nos falta, sin resultar tan excitantes como el café o las bebidas con cafeína y son mucho más saludables, además de cuidar nuestro corazón, dieta y salud, en general.