Son perfectas para tomar durante todo el año, pero, en especial, para las épocas del año más calurosas, porque tomadas bien fresquitas, además de ser un exquisito postre o parte de un desayuno, nos ayuda a cuidar de nuestra salud. Hoy te hablamos de sus beneficios y te damos unas ricas y sencillas recetas de gelatinas con té, para que las puedas disfrutar ahora y todo el año.
Por esta razón, hoy queremos repasar cuáles son esas propiedades de la gelatina y como estas se traducen en beneficios para nuestro organismo. Y para completar esos datos, te proponemos 3 recetas de gelatina con té, para que puedas disfrutar del sabor de la bebida que más te gusta, pero en otro formato. ¡Empezamos!
Beneficios de la gelatina para la salud
La encontramos fácilmente en cualquier establecimiento de alimentación, incluso en farmacias y herbolarios, porque está considerado un producto alimentario, pero también para la salud.
Procedente de materia prima de animales (al menos cuando hablamos de gelatina natural), la misma contiene un 90% de proteínas saludables, un 2% de sales minerales y agua. Pero la cosa no queda ahí. La gelatina está libre de aditivos, grasas, colesterol y ácido úrico. Además, contiene una gran cantidad de colágeno.
Todas estas razones son las que hacen que se pueda consumir a diario, que sea apta para dietas de adelgazamiento, pero también para personas que necesitan reforzar la salud de sus huesos, cabello o uñas, así como para los que tengan problemas digestivos y necesiten un alimento que reduzca ese malestar.
Todas estas propiedades hacen que la gelatina sea muy buena para la salud y, en concreto, para los puntos que vamos a hablar a continuación:
- Gelatina para las articulaciones: al aportar una gran cantidad de colágeno natural, es perfecto para mujeres a partir de la menopausia, que ven su salud ósea muy afectada. También para personas de la tercera edad, que necesitan reforzar sus huesos.
- Gelatina para la piel: por la misma razón que en el caso anterior y, especialmente, en personas de 25 años en adelante, que es el momento en el que la piel reduce la producción de colágeno natural.
- Gelatina para la salud digestiva: se ha demostrado que tomar gelatina de manera regular ayuda a reducir el estreñimiento y reduce las malas digestiones.
- Gelatina para mejorar el sistema inmunológico: ya que reduce las posibilidades de sufrir infecciones.
- Gelatina para las uñas y el cabello: puesto que les aporta queratina de manera natural, la cual también deja de producirse en la misma cantidad a partir de cierta edad.
- Gelatina para descansar: está comprobado que la glicina de la gelatina ayuda a estimular ciertos neurotransmisores y enzimas, haciendo que los ciclos del sueño sean más largos y, por tanto, conseguir un sueño más reparador.
- Gelatina para conservar el peso: ya que aporta proteínas, fibra y agua, pero muy pocas calorías (unas 17). Eso sí, es importante no tomarla con azúcar o controlar con qué ingredientes está elaborada esa gelatina.
Receta de gelatina con té matcha
Para elaborar esta receta necesitas:
- 5 gramos de gelatina
- 1 cucharada de té verde matcha ecológico especial cocina
- 300 ml de agua
- 50 ml de agua hirviendo
- Edulcorante (al gusto o si lo consideras necesario)
Una vez tengas todo listo, el primer paso es hacer la gelatina en el agua. Para ello, puedes meterla al microondas unos 20 segundos y cuando la saques, pasa al segundo paso.
Ahora toca mezclar el agua hirviendo con el té matcha y remover para que se disuelva. Cuando veas que sí que está, vete añadiendo los 300 ml de agua, hasta que la gelatina se vaya haciendo. Por último, déjala en el frigorífico durante un par de horas y ya vas a poder empezar a disfrutar de ella.
Esta receta de gelatina con té matcha es perfecta para tomar en el desayuno e, incluso, en ayunas, o como postre, incluso para una merienda saludable, esos días que no tienes mucha hambre, pero que sí que te comerías algo, sin caer en excesos.
Receta de gelatina de té rojo
Para elaborar esta receta necesitas:
- 5 gramos de gelatina en polvo
- Dos cucharadas de té rojo
- 300 ml de agua
- Canela en polvo
- Jengibre molido
- Edulcorante (opcional y al gusto)
Una vez tengas los ingredientes, el proceso es muy similar al anterior, solo que, en este caso, te recomendamos que, por un lado hidrates la gelatina para, después, poder manipularla y, por otro, prepares la infusión de té rojo y la dejes reposar, de manera que el sabor sea intenso y se note en la gelatina.
Cuando tengas estos dos pasos hechos, los unes, añades la canela y el edulcorante, si así lo deseas, remueves y esperas a que se vaya cuajando. Una vez llegado a ese paso, solo queda meterlo en la nevera un par de horas y lo consumes.
Gelatina de té negro con canela
Igual de fácil que las anteriores, pero con algo más de ingredientes. Así es la siguiente receta. Toma nota, porque necesitas:
- 4 bolsitas de té negro
- media cucharada de canela
- 2 tazas de zumo de manzana
- gelatina en polvo (4 cucharadas)
- 1 taza de zumo de arándanos
- 1 limón cortado en rebanadas
¿Ya lo tienes todo? ¡Empieza la fiesta! Por un lado, por a preparar el té negro. Por otro, hidrata la gelatina en el zumo de manzana.
Mientras tanto, coge una cazuela y añade el zumo de arándanos y lo que te sobre del zumo de manzana, mientras con el resto se sigue hidratando la gelatina. Añade también la canela y remueve mientras el fuego está a medio nivel.
Cuando la gelatina esté hidratada, llévala al microondas para que se derrita (en unos 10-20 segundos estará lista) y cuando lo esté, añádela a la cacerola mencionada en el paso anterior y mezcla bien hasta que todo se cuaje.
Por último, coge 4 tazas de té, añade un poco de gelatina en cada una, pon la rodaja de limón y mete en el frigorífico de 1 a 2 horas. Ya está lista para consumir y sorprender a tus comensales, que no se esperarían consumir té de esta manera.
Ya puedes ver que preparar gelatina es muy fácil, que tiene muchos beneficios para la salud y que, por supuesto, se puede elaborar con lo que más nos gusta: el té.
Entonces, ¿te animas a hacerlo? ¿Quieres contarnos cuál es tu receta? Te leemos.