Exceso de trabajo, problemas de pareja, la maternidad o paternidad, así como enfermedades repentinas en una persona querida o en nosotros mismos, son situaciones que nos hacen sentirnos indefensos, nos enfadamos, nos deprimimos, chillamos e incluso, afecta a nuestro organismo o vida diaria, porque nos bloqueamos.
Estas son algunas de las situaciones producidas por el estrés. Una patología que ni afecta del mismo modo a todo el mundo, ni a todo el mundo le deprime. De hecho, hay gente que, en caso de ser por exceso de trabajo, suele concentrarse mejor y trabajar más rápido y de forma más eficaz. En estos casos no será necesario intervenir, siempre que la situación no se prolongue y derive en otras consecuencias como el insomnio, la bajada de defensas o irritación de colon, por ejemplo.
Sin embargo, donde sí que resulta necesario intervenir es en las situaciones en las que el estrés se traduce en depresión, ansiedad, problemas gastrointestinales, trastornos del sueño…. y en todos casos, el té y las infusiones pueden ayudarnos.
En todo caso y como siempre recomendamos desde Aromas de Té, ante este tipo de situaciones o cualquier otra que requiera de un consejo médico experto, lo mejor es pedir cita a nuestro doctor/a o enfermera/o de confianza.
¿Qué es el estrés?
«Tensión provocada por situaciones agobiantes que originan reacciones psicosomáticas o trastornos psicológicos a veces graves», así define la Real Academia de la Lengua Española el estrés. En definitiva, se trata de la manera en la que el cuerpo reacciona cuando se enfrenta a un reto y se prepara para actuar ante una situación difícil.
Según la American Psycological Association, existen tres tipos de estrés:
- Estrés aguado: el más común y que surge de «exigencias y presiones del pasado reciente y las exigencias y presiones anticipadas del futuro cercano», en dosis pequeñas puede tener incluso su lado positivo, ya que nos ayudará a agudizar la mente y a dar más de nosotros, de lo que hubiéramos dado en una situación normal. Sin embargo, cuando es prolongado, puede resultado agotador. Afortunadamente, este tipo de estrés tan común, tiene cura sencilla y la mayoría de las personas son capaces de detectarlo, por lo que reaccionan pronto ante él.
- Estrés agudo episódico: se da en las personas que tienen estrés agudo con frecuencia, cuyas vidas son tan desordenadas que son estudios de caos y crisis. Personas muy nerviosas, fácilmente irritables y que asumen demasiadas cargas sin poder asumirlas realmente, lo que les provoca esa ansiedad constante.
- Estrés crónico: es aquel que «destruye al cuerpo, la mente y la vida. Hace estragos mediante el desgaste a largo plazo», tal y como explican desde la American Psycological Association. A diferencia de los dos primeros, éste nunca resultará emocionante para la persona que lo sufre. Este tipo de estrés es el que realmente requiere de una intervención especializada, terapias y/o fármacos.
El té y las infusiones, por tanto, pueden ayudar a combatir los dos primeros tipos de estrés, especialmente el primero, que es el más común en todas las personas y el que nos incita, más bien, a seguir adelante, más que a provocarnos problemas psicológicos graves.
Tés e infusiones para combatir el estrés «cotidiano»
Para combatir el estrés, nada mejor que eliminar esos nervios y ansiedad que nos provocan ciertas situaciones, de manera que seamos capaces de concentrarnos y afrontar la situación de la manera más lúcida y eficaz posible. Es en este punto donde las infusiones, todas en general, así como algunos tipos de té, pueden ayudarnos a conseguir ese equilibrio entre los beneficios y perjuicios que acarrea una situación estresante.
- Té verde: el aminoácido L-teína que contiene el té verde consigue que disminuya la formación y actuación de los radicales libres, que son los que pueden provocar problemas cardiovasculares o aumentar nuestra presión arterial. Además, el té ayuda a concentrarse y mejora el humor de la persona, lo que le ayuda a afrontar la situación de estrés con mejores capacidades psicológicas.
- Té negro: que se encarga de disminuir los niveles de cortisol en nuestro organismo, es decir, la hormona que provoca el estrés. Además, el efecto de relajación del mismo es bastante rápido, por lo que notarás sus efectos sin demora.
¿En qué puede ayudarte Aromas de Té?
Teniendo en cuenta los conceptos arriba mencionados, te invitamos a que si te encuentras en una situación de estrés cotidiana, visites nuestras secciones de té verde y té negro, pero también la de las infusiones, siendo nuestra infusión por excelencia, la infusión antiestress, cuyo sabor, además, te enamorará.
Además, dentro de los tés negros y tés verdes, hay algunos que por los ingredientes con los que han sido elaborados, este efecto es aún mejor. Tal es el caso de los siguientes tés: té verde ginseng pasión, té negro paquistaní o el té negro, las siete maravillas, entre otros.
