Quien más y quien menos ha tenido, a lo largo de su vida, algún problema digestivo, de mayor o menor importancia. Muchos de ellos son realmente incómodos y dolorosos y, en ocasiones, pueden llegar a impedir que sigamos con nuestra rutina. Lejos de restarle importancia y pensar que se trata de problemas pasajeros, si los trastornos digestivos se repiten, lo más aconsejable es acudir al médico de cabecera para que estudie nuestro caso y, si fuera necesario, derivarnos al especialista.
Si tú también eres de los que sufre este tipo de trastornos o los has sufrido alguna vez, hoy te proponemos que hagas con nosotros un repaso por los problemas digestivos más comunes, así como las soluciones naturales que te ayudarán a prevenirlos o a reducir e incluso, eliminar, sus consecuencias. ¿Nos acompañas?
Los problemas digestivos más comunes
Como ya hemos dicho, son numerosos los trastornos digestivos que se conocen. Entre los más conocidos se encuentra el reflujo gástrico. Éste se produce cuando el contenido que tenemos en el estómago pasa hacia la garganta a través del esófago. Esto, a su vez, produce que el esfínter se relaje, dejando de lado su función de regular el paso de los alimentos. Además, la mucosa del esófago se ve irritada produciendo una sensación de calor en el abdomen superior.
Comúnmente llamamos a este trastorno acidez o ardor, debido a que uno de sus síntomas son las regurgitaciones ácidas o pirosis, pero existen otros muchos síntomas que son menos conocidos, como la afonía o tos, que se produce por la irritación de la laringe o trastornos respiratorios.
Entre las causas por las que podemos padecer reflujo, están la dieta y el estilo de vida: alimentos como el chocolate, las especias, el alcohol o el tabaco son lo primero a evitar si queremos prevenir este trastorno.
Entre los métodos médicos que existen para tratar el reflujo gástrico cabe mencionar la endoscopia superior, mediante la que se examina el estado del estómago, esófago y el duodeno y el control de PH, para medir el grado de acidez del esófago. Si queremos prevenir su aparición de manera natural, podemos ayudarnos de infusiones naturales, además de restringir de nuestra dieta las bebidas gaseosas, el alcohol, el tabaco, el chocolate o el café, tal y como hemos mencionado más arriba.
Otro de los problemas más frecuentes es la indigestión o dispepsia, que puede ser especialmente frecuente y molesta. Suele aparecer si hemos tomado en exceso determinados alimentos durante una comida o una cena, o si hemos incluido alimentos que no consumimos habitualmente. También, aunque es menos frecuente, puede producirse si estamos pasando por un período de estrés o nervios. Determinados medicamentos como los antiinflamatorios, también pueden causar una indigestión.
Este problema es fácil de reconocer ya que se caracteriza por dolores en la tripa, sensación de saciedad, aires o hinchazón del vientre. Si la causa es emocional, a estos síntomas podemos añadir el estreñimiento o diarrea y náuseas.
Entre los alimentos que debemos evitar para evitar las indigestiones están: los guisos, los huevos, la mantequilla y lácteos en general, así como las conservas con aceite y escabeche y los snacks fritos. Si aún así notamos los síntomas después de una comida, determinadas infusiones pueden ser de ayuda para revertir los síntomas.
El estreñimiento es otra de las patologías más habituales y, generalmente, no solemos acudir al médico debido a que no le damos la importancia que debería. Así, procuramos ponerle remedio mediante medicamentos o preparados naturales en casa, sin la supervisión de un especialista.
A pesar de que no se cataloga como un trastorno digestivo grave, sí que está muy relacionado con el tránsito intestinal y se ve agravado por los períodos de estrés que atravesamos y el malestar psicológico que desarrollamos en determinados momentos de nuestra vida. Entre sus síntomas encontramos: el realizar un esfuerzo excesivo cuando vamos al baño, la presencia de heces pequeñas y duras y la falta de necesidad de ir al baño.
Entre las causas que lo provocan están, además del estrés, el sedentarismo, la poca ingesta de fibra y algunos problemas relacionadas con el intestino, como una inflamación o el síndrome del colón irritable. Si queremos evitar el estreñimiento , lo mejor es realizar ejercicio de forma regular, beber mucho agua e infusiones y eliminar de nuestra dieta la carne roja, los alimentos grasos y los refrescos.
Infusiones adecuadas para trastornos digestivos
Muchos de los remedios que encontramos para este tipo de problemas digestivos se vienen administrando desde hace años por nuestros mayores. ¿A caso tu abuela no te ofrecía una manzanilla después de comer? ¿ No tiene tu madre una infusión de anís siempre a mano para tomar?
La manzanilla es una de esas infusiones básicas que tenemos que tener en casa si sufrimos problemas de digestión; es la planta más recomendada para tratar estos trastornos y su uso entre la población está tan extendido, que también podemos pedirla en bares y restaurantes para aligerar la digestión.
Es una infusión de sabor suave, que pueden tomar tanto adultos como niños y su verdadero poder digestivo está en el aceite de sus flores. Este aceite permite reducir las inflamaciones, calmar los retortijones y otros dolores de tripa. Gracias al poder espasmódico que le caracteriza, hace que los gases se reduzcan. Además, protege las mucosas de los órganos que interfieren en la digestión, evitando a la larga la aparición de úlceras estomacales.
El hinojo, es otra de las plantas más conocidas que nos ayudan a lidiar con estos trastornos digestivos. Ha sido muy utilizada durante siglos por civilizaciones como los romanos, griegos o egipcios para tratar diferentes enfermedades. Es la planta estrella para combatir los cólicos abdominales, favoreciendo la expulsión de los aires y para rebajar la hinchazón del vientre.
El anís es, junto a la manzanilla y el hinojo, otra de esas plantas utilizadas para tratar los problemas digestivos que podamos sufrir. Es recomendable tomarla antes de comer si sabemos que nos espera una comida copiosa o solemos padecer este tipo de problemas gastrointestinales.
El anís se caracteriza por ser un sedante natural, y si nuestros problemas intestinales se derivan de una situación nerviosa, la infusión de sus frutos nos ayuda a reducir considerablemente dichas molestias. Además es el aliado esencial contra la acidez que podamos sentir derivada del reflujo gástrico.
El regaliz es otra de las plantas medicinales todoterreno que mejora una extensa lista de dolencias digestivas. Calma las posibles alteraciones del sistema digestivo y además es un laxante ligero para solucionar los primeros estadios del estreñimiento. Al ser antiespasmódico, evita el dolor abdominal y la acidez.
El jengibre también ayuda a nuestro sistema digestivo: gracias a sus componentes, como el gingerol, estimula los jugos gástricos y biliares, lo que facilita enormemente las digestiones. Uno de sus mayores beneficios es que reduce las nauseas y los vómitos y que previene los espasmos intestinales, los cólicos y los aires.
Está considerado uno de los estimulantes digestivos más poderosos, ya que también mejora el reflujo gastrointestinal y reduce la sensación de lleno que nos dejan las comidas abundantes.
¿Qué puede hacer Aromas de Té por tu salud digestiva?
Está claro que no somos ni médicos, ni curanderos, pero si hay algo que sabemos hacer bien, o al menos así lo certifican los cientos de clientes fieles que tenemos, son tés e infusiones. Así que teniendo en cuenta los tipos de plantas medicinales que hemos mencionado más arriba, desde Aromas de Té, además de las infusiones básicas que se elaboran con dichas plantas, hemos hecho una selección de otras variedades que también te pueden interesar. ¡A ver qué te parecen!
La infusión ‘Secretos del tiempo ecológica‘ es una de las más efectivas cuando hablamos de mejorar las digestiones y todas las afecciones que surgen alrededor del sistema digestivo, ya que contiene flores de manzanilla e hinojo. Acompañan a estas plantas el lemon grass, la hierbabuena y hojas de fresa, lo que confiere a esta infusión un toque frutal y fresco para disfrutar de ella en los días calurosos bien fresquita o caliente durante todo el año. ¡Cualquiera de las dos opciones será un acierto!
Como no podía ser de otra forma, la infusión Rooibos Digestiv combina el poder digestivo y sedante del anís de una forma completa. Incluye tanto anís en grano como anís estrellado junto al té rooibos, uno de los más beneficiosos para nuestro sistema digestivo: ayuda a que nuestro cuerpo realice el trabajo de forma fácil y sin complicaciones. Su gusto floral te conquistará desde el primer instante y será una de las infusiones de cabecera en tu cocina.
Siente todo el poder digestivo del regaliz con este el té verde al regaliz. Al efecto refrescante y antioxidante del té verde se unen las propiedades digestivas del regaliz. Si estamos pasando un período de estreñimiento, es un té que nos aliviará y deshinchará, al mismo tiempo que nos hará sentirnos más ligeros.
Muchas veces, el estrés diario y el ritmo frenético del día a día hacen que los problemas intestinales se intensifiquen, por eso, las infusiones que nos permiten relajarnos y entrar en un estado de bienestar profundo nos ayudan a reducir los problemas digestivos. La infusión antiestrés es una de ellas. Combina las propiedades del jengibre y del hinojo con el sabor de la naranja y el toque especiado de la canela. Después de come, seguro que decides tomarte, aunque sea cinco minutos, para saborear esta infusión y beneficiarte de su acción relajante. Así afrontarás con energía lo que queda de jornada.
Estas son sólo algunas ideas que te damos para que, al mismo tiempo que cuidas de tu salud digestiva, también disfrutas de una infusión agradable y diferentes a las básicas y tradicionales. Y tú, ¿tienes alguna infusión preferida para tratar este tipo de dolencias? ¡Nos encantará que nos lo cuentes!